25 de Junio, 2025
El antropólogo, quien falleció este 20 de junio, fue un colaborador recurrente de la Estación Patagonia UC y un apasionado defensor de anfibios y reptiles, con un compromiso incansable por visibilizar su fragilidad y trabajar por su conservación. Su profundo conocimiento y rigurosidad lo convirtieron en un referente nacional e internacional en herpetología. Fue miembro activo del Grupo de Especialistas en Anfibios de Chile y participó en múltiples iniciativas para rescatar, estudiar y proteger especies emblemáticas como la Ranita del Loa y la Ranita de Darwin.
“Con profundo pesar lamentamos el fallecimiento de Andrés Charrier, naturalista, herpetólogo, fotógrafo e investigador/colaborador de nuestra estación en Aysén. Su partida deja un vacío inmenso, no solo en nuestra comunidad, sino también en el mundo de la conservación de la biodiversidad en Chile”.
Con estas palabras, los investigadores y la comunidad vinculada a la Estación Patagonia UC despidieron al antropólogo, quien fue un estrecho colaborador de este centro de investigación interdisciplinario, que se encuentra bajo la gestión del Instituto de Geografía UC.
El fallecimiento de Charrier enlutó no sólo al mundo académico, sino que también al de la conservación: “A lo largo de su vida, Andrés participó activamente en proyectos de conservación, divulgación científica y educación ambiental. Fue autor de libros como la Guía de Anfibios de los bosques de la zona centro-sur y Patagonia de Chile (2019), orientada a niñas y niños, y colaborador de medios como Ladera Sur, con quienes compartía su visión sobre el rol de la ciencia, la fotografía y el arte como herramientas de transformación”, aseguraron desde Estación Patagonia.
Una trayectoria marcada por la cercanía
Charrier fue un visitante e investigador recurrente de la Estación Patagonia UC, viajando hasta la Estación en el Valle Exploradores (Región de Aysén) para realizar trabajo de terreno, observación, registros y documentación de fauna, especialmente de anfibios.
“Su vínculo con el equipo local era cercano y muy querido: compartía su conocimiento con generosidad, siempre disponible para conversar, enseñar y acompañar con entusiasmo cada caminata o jornada en la naturaleza”, aseguran desde el centro de investigación.
Al tiempo que también destacaron su faceta como fotógrafo y realizador, a través de la cual aportó imágenes y videos que capturan con una mirada única la riqueza de la fauna y los paisajes de la región: “Sus registros han nutrido nuestro archivo visual y han sido clave para comunicar, sensibilizar y educar sobre los ecosistemas que buscamos proteger. Sus videos con dron, en particular, nos regalaron nuevas formas de mirar el territorio”.
Vida dedicada a la biodiversidad
Inspirado por naturalistas como Humboldt, Wallace, Darwin y Philippi, se definía como un “antropólogo extraviado, naturalista y fotógrafo”.
En ese sentido, en 2019, lideró el rescate de los últimos ejemplares conocidos de la ranita del Loa, amenazada por la sequía extrema y la contaminación de su hábitat. Gracias a esa acción y a su colaboración con instituciones nacionales e internacionales, la especie logró sobrevivir en condiciones de cautiverio y recientemente tuvo una reproducción exitosa en Londres.
Legado
Para quienes trabajan en la Estación Patagonia UC, Andrés fue mucho más que un coinvestigador o colaborador: fue un compañero de ruta, un referente y un amigo.
Tal como señaló Raquel Godoy, coordinadora local de la Estación Patagonia UC: “Conocer a Andy ha sido uno de los mejores regalos que la vida me ha dado, con quien pude compartir mi amor por los anfibios de Chile y del planeta; caminar junto a él, bajo la lluvia en el inmenso bosque de la Estación Patagonia UC, solo para buscar, escuchar y encontrar ranitas fue un verdadero honor”.
Así mismo, la coordinadora destacó también la pasión por la divulgación científica que caracterizó a Charrier: “Fue un comunicador por excelencia, con sus obras, vino a llenar vacíos ya que acercó el conocimiento de la herpetología a distintas personas que pudieran estar interesadas en aprender sin ser expertos. Además, con el libro Croares, supo integrar el arte para despertar la curiosidad científica en niñas y niños”.
Por último, desde la Estación Patagonia señalaron: “Despedimos con tristeza a Andrés, pero también con gratitud por su generosidad, por todo lo que nos enseñó y por todo lo que nos dejó. Sabemos que su legado continuará en sus libros, sus fotografías, y en las muchas personas e instituciones que lo conocieron y trabajaron junto a él”.